Durante los últimos años hemos sido testigos de un sinnúmero de aplicaciones para la impresión 3D en el área de la medicina.
El mundo de la biomedicina alberga un caldo de cultivo para todo tipo de ideas que requieran de personalización extrema, que sólo pueden ser llevadas a la realidad mediante la impresión en 3 dimensiones; el estudio de la anotomía humana es uno de los campos que presenta mayor interés.
Usando algoritmos especializados y procesamiento digital, la férula (yeso o escayola) CORTEX ® de Jake puede ser fabricada a la medida para ajustarse a fracturas en forma específica, tomando en cuenta las características individuales de cada paciente. Mediante la combinación de varios de los aspectos del escaneo 3D, y la tecnología de Rayos-X, modelos únicos pueden ser generados digitalmente para adaptarse a las necesidades de presión y colocación requeridas.
La inspiración para la estructura en forma de panal deriva de las trabéculas, que son las vigas orgánicas, puntales y varillas que componen la estructura de la geometría del enrejado en el tejido al interior del hueso. Es algo así como una estética casualmente práctica, frecuentemente vista en objetos impresos en 3D.
El diseño del prototipo original fue impreso por Shapeways, en sus instalaciones en Holanda. Los futuros modelos serán de aproximadamente 3 mm de espesor y pesarán menos de 500 gr. También serán totalmente resistentes al agua, y completamente reciclables, sin ese característico olor de los sistemas de inmovilización actuales.
Jake Evill fue galardonado hace poco con el New Zealand National James Dyson Award por su diseño.
Fuente: Solidsmack via Jake Evill